
Redacción (Con información de SinEmbargo)
MARZO 13 DE 2020.- Las aerolíneas comienzan a registrar pérdidas; anuncian cancelación de vuelos y flexibilidad para postergarlos. El problema no solo se queda ahí, sino que llega a los hoteles, a los restaurantes, a todos los servicios que se nutren del turismo como el transporte o el comercio. El COVID-19 o nuevo coronavirus, tendrá implicaciones en la economía macro y micro del país.
De acuerdo con economistas eso ocurrirá, “sí o sí”.
En los últimos 27 años y en promedio, las actividades turísticas fueron equiparables al 8.5 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB) nacional. La derrama económica derivada del turismo se estancó en el último año, ya que la variación porcentual fue de cero puntos porcentuales entre 2018 y 2019, de acuerdo con cifras del Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática (Inegi).
Hoy en día, el PIB turístico es equiparable al 8.7 por ciento del PIB nacional, o a casi dos billones de pesos corrientes de 2019.
El coronavirus viene a completar la “tormenta perfecta” de un entorno adverso para la economía internacional. Economistas entrevistados por SinEmbargo coincidieron en que el virus llega en un año en el que no se tenían los mejores pronósticos de crecimiento y los precios del petróleo, la gran materia de México, vienen en picada.
En el caso particular de nuestro país, los efectos que aún no son de la magnitud que en otros países, tendrán un efecto de escalera, es decir, empezarán desde un nivel hasta llegar al estrato más bajo, que en este caso serán las y los trabajadores informales.